Prensa y fotografía
Protestas frente a la sede de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Cd. de México |
Por ejemplo y aunque también parezca obvio, poco se ha dicho respecto a cómo la orientación de un diario (análogo o electrónico) o agencia de noticias, afecta los contenidos de las fotografías que publican, tanto como a sus formas y cómo es que, de acuerdo con esto, una misma imagen puede brindar, incluso, significados opuestos dependiendo, no únicamente de lo que reproduce, sino de la orientación ideológica del medio que la presenta. En este mismo sentido y a pesar de haber abundante literatura al respecto, con frecuencia se nos pasa por alto, de qué manera actúan las imágenes en un medio periodístico (impreso o electrónicas). Es decir, olvidamos y no investigamos más, cómo es que una imagen o una serie de ellas pueden ser suficientes para inclinar a favor o en contra la balanza de la opinión pública (social, económica o políticamente), aún a estas alturas de la vida sigue estando vigente la sentencia que dicta que una imagen vale más que mil palabras. Y no sólo eso, sino que, por razones similares, pueden contribuir grandemente a la formación y difusión de estereotipos, campañas de odio, linchamientos populares, etc., basta recordar todo lo que sabemos sobre la post-verdad y los efectos negativos que conlleva y sus atroces consecuencias. ¿Qué papel en específico juegan las imágenes difundidas por los medios, no solo como piezas de comunicación, sino como generadoras o motivo principal para dar lugar a esos acontecimientos y similares?, ¿cuántas fotografías no han nacido de haber escuchado o leído un discurso machista, racista o clasista?, con lo que han contribuido a difundir, apoyar y justificar tales posturas.
Pasemos ahora a explorar algunas relaciones prácticas que se pudieran establecer entre la prensa y la fotografía. En términos generales, digamos que en los últimos 20 o 25 años se ha dado una migración de los medios impresos a los electrónicos, llevando a muchos, periodistas incluso, a pronosticar la eventual muerte de periódicos y revistas. No voy a entrar a comentar qué tanto se ha cumplido la profecía ni cuál es el estado actual que presentan estos medios de comunicación (algo similar se podría decir, creo, respecto a la TV y las transmisiones vía satélite), lo que sí apuntaré es que este desplazamiento dejó importantes espacios vacíos en los medios tradicionales, espacios no físicos forzosamente, sino conceptuales, espacios que fueron formándose a lo largo de la práctica de un oficio, para este momento, ya centenario. Llamo a manera de ejemplo a las notas o columnas editoriales, estas tienen la gran ventaja sobre cualquier otro género periodístico, que no dependen de la actualidad, es decir no pierden vigencia conforme se suceden los hechos. Un buen o mal editorial se puede leer en el momento, pero también más adelante o se puede guardar como una especie de memoria subjetiva. La prensa actual, creo yo, debiera estar llena de estas notas que requieren de un mayor tiempo de lectura y reflexión y no de la acción inmediata y finita como a la que nos mueven los medios electrónicos.
La fotografía no sólo podría volverse igualmente editorial, sino también apropiare de las páginas de revistas y periódicos para, así como hay fotolibros, convertirlas en fotoperiódicos o fotorevistas. Acciones como estas, no tendría que esperar a grandes inversiones financieras para llevarse a cabo, sino que pudieran surgir de acuerdos entre el medio de comunicación y la comunidad de fotógrafos profesionales y amateurs de la ciudad, la zona o comunidad. Creo, sinceramente que el par prensa fotografía aún tiene mucho que aportar para el bien de ambos medios.
Publicado por Milenio Diario
Imagen: vanguardia.com.mx
Comentarios
Publicar un comentario