2, 3, o +: La patria; un thriller; ¿se puede acabar la magia?

 

José Clemente Orozco. Hidalgo. Palacio de Gobierno, Guadalajara, Jalisco. 1937

LA PATRIA
Se conmemora un año más del “grito de Dolores” o, más precisos, de la fecha que se ha elegido como el inicio de la lucha armada que nos llevaría a la independencia de España.

En este como en otros casos, no hay que olvidar que existe una historia oficial y la historia a secas. Lo que hoy festejamos corresponde a la versión oficial de la historia patria, difundida a nivel masivo por diversos medios, incluido de manaera sobresaliente, el movimiento muralista, que fue el responsable no solo de darles un rostro y cuerpo a los proceres mexicanos, sino de rodearlos de heróicas acciones, o actitudes visionarias que anticipan un México de paz, justicia y prosperidad. El problema no es el nivel de ficción que se maneja en todos los murales que se han ocupado de estos temas, sino la insistencia en que estas son las imágenes de la nación, las que ilustran la verdadera historia del tránsito del pueblo de México a través del tiempo, esto es, mantenerlas a nivel de mito más que de obras de arte, que es lo son y como debieran prevalecer, en lugar de querer verlos como si de instanténeas se tratara.

Rebeccah Blum y Saul Fletcher

UN THRILLER
Desde finales de julio he tratado de exponer este tema. Un caso aparentemente común de nota roja, donde un amante, el hombre, mata a su pareja y después comete suicidio. Son Rebeccah Blum, norteamericana de 53 años, avecindada en Alemania, famosa y apreciada crítica de arte en Europa, y Saul Fletcher, fotógrafo inglés, de 52 años. Sus cuerpos fueron hallados el 22 de julio y no dejan lugar a dudas sobre lo que sucedió.

Lo triste del caso es que expone dos situaciones que por lo general no son vistas como relevantes. Por un lado el tipo de relación de pareja que suele darse en estos ambientes y que se tolera en nombre del genio, la creatividad, o hipersensibilidad que la producción artística requiere, cuando, muchas veces, en verdad escoden relaciones asimétricas y enfermizas que ponen en riesgo la estabilidad, emocional y física, de la pareja. Tan solo pensar en los casos de Nan Goldin o el más trágico de Ana Mendieta, para darnos cuenta de que no se exagera en el tema.

La otra situación que queda al descubierto, es la atención a la que pueden tener acceso estas personas. En el caso de Fletcher, se sabía de su bipolaridad y largos períodos de depresión y, sin embargo, nunca se acercó a solicitar ayuda o hubo alguien que se la brindara, incluida su pareja; ya sea porque la mayoria de estos casos carecen de seguridad social (a pesar de los países donde viven) o no es valorada correctamente su enfermedad. Un tema que, creo en nuestro caso, debiera pensarse y discutirse con mayor atención.

Roger Ballen. Bubble Bath. 2016

¿SE PUEDE ACABAR LA MAGIA?

Para mi, uno de los fotógrafos más inquietantes que hay es, sin duda, el norteamericano Roger Ballen (1950), lo mismo por sus primeras fotografías documentales (siempre de lugares remotos los que se dispuso conocer desde el ’73), las que obtuvo a su arrivo definitivo a Sud Africa (incluidos retratos), como por las series que le han dado fama Asylum of Birds, Shadow Chamber, Animal abstraction, o incluso por los videos que ha hecho en colaboración con el grupo Die Antword. Además, en todas sus entrevistas y declaraciones, se muestra un tipo inteligente, congruente y consciente de su quehacer y siempre dispuesto a ayudar al país que hoy es su hogar.

Pues bien, se acaba de prsentar una muestra suya, El mundo de Roger Ballen, en Art París 2020 (versión adaptada de otra mayor, El mundo según Roger Ballen, también inaugurada en París), compuesta de fotografías, dibujos e instalaciones.

Desde luego no conozco ninguna de las dos muestras, por lo que mi comentario es forzosamente, parcial, pero por el material que he logrado recopilar, me da la impresión general de que hay algo que se pierde en estos últimos trabajos; quizás la explotación de esos recursos que resultaron tan contundentes (dibujos de niños y border-lines; ambientes marginados, cohabitación con animales, máscaras, talismanes, etc.), haya llegado a su límite y de terribles se empiezan a parecer más a una parodia de sí mismos o incluso a

simples caricaturas. De pronto me encuentro con un Ballen, más creador de imágenes que fotógrafo, quizás en esta nueva apreciación no haya tanto lugar para la magia de otros tiempos. 

Publicado originalmente en Milenio Diario

Se puede ver también en www.artes2010.wordpress.com

Imágenes: regeneracion.mx

artnewspaper.com

loeildelaphotographie.com